Queridos amigos:
Interesante post nos propone hoy nuestra amiga y compañera Rosa. Es curioso el análisis que hace de la debilidad de la economía española, basándose para concluir este extremo, en la respuesta a la crisis húngara.
La defensa de este argumento no parece tener en cuenta que el viernes, tras conocerse los datos de la Contabilidad nacional griega, por cierto en forma de mensajes tipo Rajoy de dirigentes griegos, o similares a los que se exponen en el post de la señora Díez, bajaron todos los índices bursátiles europeos y trasatlánticos: Londres (1,63%), Francfort (1,91%), París (2,86%), Milán (3,79%), Madrid (3,80%), el Dow Jones (3,16%), el Nasdaq (3,64%). Hoy lunes, han sido los mercados de Asia - Pacífico los que han cerrado con las mayores pérdidas: Tokio (3,84%), Sydney (2,78%) y Hong Kong (2,03%). ¿También tiene la culpa Zapatero de la bajada de las Bolsas asiáticas?.
Por otra parte, el tipo de cambio del euro se redujo con respecto al dólar, al yen o al franco suizo, en concreto el tipo de cambio dólar / euro se redujo hasta 1,20 euros dólares por un euro, el pasado viernes. Todos los expertos atribuyen estos hechos a que la recuperación estadounidense, concretada en la creación de empleo, no es tan vigorosa como se esperaba, que produjo incluso una bajada en el precio del crudo, y de las materias primas; además de los niveles de la deuda de la zona euro, y las preocupaciones sobre el sector bancario. ¿Tiene la culpa Zapatero de la escasa salud financiera del banco francés Societe Generale, en parte responsable de la bajada de las bolsas británica y francesa?.
Lo que está claro es que la economía ha iniciado su recuperación, y a un ritmo más elevado de lo que se esperaba, aunque a un ritmo desigual en las distintas regiones y países del mundo. En estas circunstancias, la volatilidad de los mercados nos recuerdan que los desafíos significativos perduran. Incluso el secretario del Tesoro norteamericano, Timothy Geigner, apuntó la necesidad de reforzar la demanda interna de los países europeos y asiáticos, al estar todavía ajustándose la demanda interna norteamericana, que en estos momentos posee un elevado nivel de ahorro.
En la última reunión del G20 los expertos internacionales han apostado por que los países lleven a cabo políticas de consolidación presupuestaria y reactivación económica, diferenciadas y adaptadas a las necesidades de cada país. Eso se llama coordinación, y no tutela de nadie. Por otra parte, el primer ministro británico, ha comunicado hoy que prepara un amplio recorte del gasto, anunciando que posiblemente afecten a los desembolsos de la seguridad social, al sueldo de los funcionarios y a reducción de la burocracia. ¿La oposición dirá que han intervenido desde Europa al nuevo Gobierno británico, o que convoque elecciones por tomar medidas impopulares?.
En Alemania, Ángela Merkel, ha anunciado que debe ahorrar 80.000 millones de euros antes de 2014 para consolidar su presupuesto, anunciando un recorte de 10.000 funcionarios durante los próximos cuatro años, reducciones de subsidios a los nuevos nacimientos, o el establecimiento de impuestos sobre la industria eléctrica, además de demorar la promesa electoral de bajada de impuestos en los dos próximos años. Y el déficit de Alemania es del 5% del PIB, no del 11,2% como el nuestro. Si en lugar de Merkel, estas medidas fueran anunciadas por Zapatero, ¿qué se le diría por otros irresponsables políticos?.
En definitiva, la situación económica es complicada, no sólo para España, sino para Europa, vivimos un momento típico de una fase de salida de la crisis internacional de 2007, y en estos momentos toca reducir la deuda pública generada al inyectar en su momento fondos públicos, con objeto de evitar una caída de la actividad económica que sumiera el planeta en una depresión difícil de salir. De la actitud de los políticos, y del grado de colaboración con el Gobierno de España va a depender la recuperación económica de nuestro país. Dejemos de mostrar discrepancias absurdas con el presidente del Gobierno, dejemos de reclamar elecciones anticipadas, y facilitemos la gestión de la crisis, para que dentro de dos años, los ciudadanos elijan quién desea que les Gobierne. Salud y feliz semana.
Interesante post nos propone hoy nuestra amiga y compañera Rosa. Es curioso el análisis que hace de la debilidad de la economía española, basándose para concluir este extremo, en la respuesta a la crisis húngara.
La defensa de este argumento no parece tener en cuenta que el viernes, tras conocerse los datos de la Contabilidad nacional griega, por cierto en forma de mensajes tipo Rajoy de dirigentes griegos, o similares a los que se exponen en el post de la señora Díez, bajaron todos los índices bursátiles europeos y trasatlánticos: Londres (1,63%), Francfort (1,91%), París (2,86%), Milán (3,79%), Madrid (3,80%), el Dow Jones (3,16%), el Nasdaq (3,64%). Hoy lunes, han sido los mercados de Asia - Pacífico los que han cerrado con las mayores pérdidas: Tokio (3,84%), Sydney (2,78%) y Hong Kong (2,03%). ¿También tiene la culpa Zapatero de la bajada de las Bolsas asiáticas?.
Por otra parte, el tipo de cambio del euro se redujo con respecto al dólar, al yen o al franco suizo, en concreto el tipo de cambio dólar / euro se redujo hasta 1,20 euros dólares por un euro, el pasado viernes. Todos los expertos atribuyen estos hechos a que la recuperación estadounidense, concretada en la creación de empleo, no es tan vigorosa como se esperaba, que produjo incluso una bajada en el precio del crudo, y de las materias primas; además de los niveles de la deuda de la zona euro, y las preocupaciones sobre el sector bancario. ¿Tiene la culpa Zapatero de la escasa salud financiera del banco francés Societe Generale, en parte responsable de la bajada de las bolsas británica y francesa?.
Lo que está claro es que la economía ha iniciado su recuperación, y a un ritmo más elevado de lo que se esperaba, aunque a un ritmo desigual en las distintas regiones y países del mundo. En estas circunstancias, la volatilidad de los mercados nos recuerdan que los desafíos significativos perduran. Incluso el secretario del Tesoro norteamericano, Timothy Geigner, apuntó la necesidad de reforzar la demanda interna de los países europeos y asiáticos, al estar todavía ajustándose la demanda interna norteamericana, que en estos momentos posee un elevado nivel de ahorro.
En la última reunión del G20 los expertos internacionales han apostado por que los países lleven a cabo políticas de consolidación presupuestaria y reactivación económica, diferenciadas y adaptadas a las necesidades de cada país. Eso se llama coordinación, y no tutela de nadie. Por otra parte, el primer ministro británico, ha comunicado hoy que prepara un amplio recorte del gasto, anunciando que posiblemente afecten a los desembolsos de la seguridad social, al sueldo de los funcionarios y a reducción de la burocracia. ¿La oposición dirá que han intervenido desde Europa al nuevo Gobierno británico, o que convoque elecciones por tomar medidas impopulares?.
En Alemania, Ángela Merkel, ha anunciado que debe ahorrar 80.000 millones de euros antes de 2014 para consolidar su presupuesto, anunciando un recorte de 10.000 funcionarios durante los próximos cuatro años, reducciones de subsidios a los nuevos nacimientos, o el establecimiento de impuestos sobre la industria eléctrica, además de demorar la promesa electoral de bajada de impuestos en los dos próximos años. Y el déficit de Alemania es del 5% del PIB, no del 11,2% como el nuestro. Si en lugar de Merkel, estas medidas fueran anunciadas por Zapatero, ¿qué se le diría por otros irresponsables políticos?.
En definitiva, la situación económica es complicada, no sólo para España, sino para Europa, vivimos un momento típico de una fase de salida de la crisis internacional de 2007, y en estos momentos toca reducir la deuda pública generada al inyectar en su momento fondos públicos, con objeto de evitar una caída de la actividad económica que sumiera el planeta en una depresión difícil de salir. De la actitud de los políticos, y del grado de colaboración con el Gobierno de España va a depender la recuperación económica de nuestro país. Dejemos de mostrar discrepancias absurdas con el presidente del Gobierno, dejemos de reclamar elecciones anticipadas, y facilitemos la gestión de la crisis, para que dentro de dos años, los ciudadanos elijan quién desea que les Gobierne. Salud y feliz semana.
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