SEÑOR PRESIDENTE DE LAS CORTES: El segundo punto del orden del día está
constituido por el debate y votación del Dictamen emitido por la Comisión de Economía y
Presupuestos, sobre el Proyecto de Ley de Presupuestos Generales de la Junta de
Comunidades de Castilla-La Mancha para 2020.
Va a intervenir el Consejo de Gobierno. En tal caso, tiene la palabra el consejero de Hacienda
y Administraciones Públicas.
SEÑOR CONSEJERO DE HACIENDA Y ADMINISTRACIONES PÚBLICAS (Don Juan
Alfonso Ruiz Molina): Gracias, presidente.
Señorías, permítanme una breve intervención en el inicio del debate y votación del Dictamen al
Proyecto de Presupuestos de la Junta de Comunidades para 2020, el primero de esta segunda
legislatura de Emiliano García-Page.
Un presupuesto que establece, de manera clara y diáfana,
cuál va a ser o cómo pretendemos que sea la distribución de los recursos públicos de que
dispone la Administración regional para el próximo ejercicio, y que pretende continuar generando
riqueza y empleo en la región, y, desde luego, consolidar y proteger el estado del bienestar, dos
objetivos indispensables e irrenunciables para seguir impulsando el progreso y el desarrollo
sostenible de la comunidad autónoma, como así ha ocurrido en los últimos cuatro años.
Un debate que se afronta en un nuevo marco, un marco de estabilidad política, si lo queremos
comparar, con respecto a la legislatura anterior, y que nos va a permitir, como todo parece
indicar, que el presupuesto esté vigente a partir del próximo 1 de enero, y, por lo tanto, sin
retraso ni prórroga alguna.
Estamos ante un presupuesto que se ha elaborado de la mano de la ciudadanía y de los
agentes sociales y económicos de la región. Un presupuesto que también es fruto y consecuencia de la gestión que el Gobierno de Emiliano García-Page ha llevado en los últimos
cuatro años para abordar, como bien saben sus señorías, la recuperación económica y social de
Castilla-La Mancha. Por lo tanto, se trata de un presupuesto que es un punto y seguido respecto
a la legislatura anterior, porque hay que reconocer que lo que ha funcionado bien no lo debemos
desechar, sino todo lo contrario, debemos reforzarlo.
Estamos ante un proyecto de presupuestos que está bien diseñado desde el punto de vista
económico, desde el punto de vista social y desde el punto de vista financiero, y que, como he
tenido ocasión de señalarles a sus señorías en otras ocasiones, se sustenta en dos grandes
objetivos estratégicos: el primero, como no podía ser de otra manera, es generar riqueza
incentivando el crecimiento económico, así como la creación y consolidación de empleo; y el
segundo, lógicamente y consecuencia del primero, es redistribuir parte de esa riqueza generada,
para consolidar el estado de bienestar, modernizar los servicios públicos y, desde luego, apoyar
la igualdad de oportunidades entre los ciudadanos y ciudadanas de esta región.
Dos objetivos estratégicos que se complementan con un tercero de carácter transversal, que
es la lucha contra la despoblación y el declive demográfico, y estos objetivos se van a llevar a
cabo desde el diálogo social, sin incrementar el esfuerzo fiscal, cumpliendo con los objetivos de
estabilidad presupuestaria y desarrollando los compromisos adquiridos con los ciudadanos y
ciudadanas de Castilla-La Mancha.
Señorías, hoy debatimos cómo queremos gestionar un proyecto de presupuestos que supera
los 10.000 millones de gasto total, con más de 8.000 millones de presupuesto no financiero, un
6,3 % más que el último presupuesto aprobado, que es el de 2018, y en términos absolutos
supone contar con más de 480 millones de euros adicionales para distribuir entre las diferentes
políticas de gasto.
Hay que recordar que detrás de cada decisión de gasto hay un ciudadano, una ciudadana, un
empresario o empresaria a los que les repercute esta decisión en su vida cotidiana, en su
bienestar personal o familiar, en sus proyectos profesionales o empresariales, y por eso
intentamos maximizar, en beneficio de la ciudadanía, cada céntimo público de la Administración
regional.
Seguimos siendo, señorías, un Gobierno que trabaja con alma y cabeza, y esa dualidad es la
llave maestra que va a hacer girar de manera efectiva el presupuesto de la Junta de
Comunidades para 2020.
(Aplausos).
Con cabeza, porque para incentivar el crecimiento económico y crear empleo destinaremos
422 millones de euros, un 9,4 % más que en el presupuesto 2018, y son, señorías, tres puntos
más que el incremento del gasto no financiero. Era la mejor cifra que iba a señalar, y le ha
asustado al presidente del Grupo Parlamentario Popular.
También hacemos una apuesta por la investigación, el desarrollo y la innovación, con más de
119 millones de euros, un 7,5 % más que en el presupuesto 2018. Por otro lado, consolidamos
los recursos destinados a la economía agroalimentaria y a la política medioambiental, con 1.400
millones de euros, siendo la tercera partida de gasto más importante de estos presupuestos.
Unas medidas públicas que tienen como objetivo consolidar y ampliar la musculatura
empresarial en Castilla-La Mancha para crear más empleo, que ese empleo sea de calidad,
reduciendo la tasa de paro, como hemos hecho en la legislatura anterior.
Señorías, este presupuesto debe ser el punto de partida para transformar, en esta nueva
legislatura, el modelo productivo hacia uno más sostenible, innovador, competitivo y basado en el
conocimiento, bajo el marco del pacto por el crecimiento y la convergencia económica que el
Gobierno suscribió el pasado mes de julio con los agentes sociales y económicos.
Pero,
señorías, también es un presupuesto que invierte en la ciudadanía. Por este motivo
destinaremos más de 5.600 millones a financiar el estado del bienestar, una cifra que representa
el 71,2 % del gasto no financiero.
De esta forma, el gasto social se incrementa un 8 % con respecto al presupuesto 2018, que ha
sido dos puntos más que el gasto no financiero. Contaremos, en este sentido, con 416 millones
más para, como acabo de decir, consolidar el estado del bienestar.
Un presupuesto marcadamente social, que nos va a permitir seguir reduciendo las listas de
espera, mejorar la calidad educativa, financiar adecuadamente las universidades públicas, consolidar la atención a la dependencia, reforzar la red de atención a las personas mayores y
con discapacidad, o incrementar las ayudas a las familias con menos recursos económicos.
En
definitiva, cumplir nuestro compromiso adquirido en 2015 de blindar el estado del bienestar.
De esta manera, la partida destinada a la sanidad es la más alta de toda la Junta,
prácticamente alcanza los 3.000 millones de euros, casi el 40 % del gasto no financiero, y la de
educación es la segunda más alta, con más de 1.800 millones de euros, mientras que la
destinada a servicios sociales, con cerca de 800 millones de euros, crece un 8,4 % con respecto
a 2018.
En 2020 continuaremos incrementando la plantilla de la Administración regional, que alcanza
ya los 75.000 empleados y empleadas públicas, además de proseguir con la mejora de sus
condiciones laborales y retributivas, y así el capítulo destinado a los recursos humanos es el que
mayor incremento experimenta con respeto a 2018, un 9,2 %.
También será un presupuesto que dispondrá de más recursos para nuevas dotaciones
públicas. Recordarles que las inversiones para infraestructuras de carácter social, que ascienden
a 129 millones, crecerán un 35 % con respecto a 2018.
Esta es la naturaleza de este proyecto de presupuestos, que refleja la esencia propia del
Gobierno de Castilla-La Mancha, y estoy convencido que se identifica con los avances
económicos y sociales que la sociedad castellanomanchega espera para 2020.
Por este motivo,
por estas bondades, por esta distribución de los recursos, el proyecto de presupuestos que
presentó el Gobierno y que ha sido debatido en la correspondiente comisión, por esas bondades
pido al Grupo Popular y al Grupo Ciudadanos que reconsideren su posición contraria a este
presupuesto, y, desde luego, con más motivo si analizamos sus enmiendas, pues tengo que
reconocer que su impacto es ínfimo si lo comparamos con los más de 10.000 millones que se
recogen en el estado de gastos total.
Porque en relación a las enmiendas presentadas por la oposición, si lo analizamos desde el
punto de vista funcional, es decir, desde el punto de vista de los objetivos que queremos
conseguir, las presentadas y defendidas por el Grupo Popular modifican solamente en 68
millones de euros la distribución que se contiene en el proyecto de presupuestos entre las
grandes áreas de gastos. Es decir que, de acuerdo con sus enmiendas, alterarían solamente el
0,6 % de esa distribución.
Algo similar ocurre con las enmiendas presentadas por el Grupo Ciudadanos, que con 25
millones alterarían esa distribución que ha hecho el Gobierno en relación a los diferentes
objetivos de política económica que se pretenden conseguir con el presupuesto, en tan solo el
0,2 %.
Significa con eso que, tanto el Partido Popular como el Grupo Ciudadanos avalan en más de
un 99 %, incluso podría decir el 99,3 %, la distribución que ha hecho el Gobierno respecto a las
grandes áreas de gasto.
Es verdad que son enmiendas que no se puede aceptar, porque el Partido Popular propone
reducir un 50 %, es decir, más de 61 millones de euros, los recursos destinados a investigación,
desarrollo e innovación, que, como he señalado antes, ascendían a 119 millones de euros, lo
que demuestra, por otra parte, que la innovación, la investigación y el conocimiento no forman
parte del ideario del Partido Popular.
Por su parte, Ciudadanos pretende reducir 25 millones en las áreas destinadas a incentivar la
competitividad empresarial y la generación de empleo, lo que parece que es obvio que el
Gobierno no está de acuerdo con ello.
Si se analizaran las enmiendas desde el punto de vista económico, es decir, en función del
reparto que el Gobierno ha hecho entre los diferentes capítulos de gasto, viene a ocurrir algo
similar, ya que las enmiendas presentadas por el Grupo Popular alterarían esa distribución, en el
1,2 %, y las presentadas por Ciudadanos, que son menos enmiendas y, por lo tanto, menos
cuantía, alterarían solamente el 0,2 %.
Por lo tanto, parece que, desde el punto de vista de la
distribución de los recursos, desde la perspectiva económica, también están, sus señorías, los
grupos de la oposición, de acuerdo con este proyecto en el 98,7 %.
Es verdad, insisto, que son enmiendas las que alteran la distribución económica del
presupuesto, que tampoco se pueden afectar, porque las que presenta el Grupo Popular
plantean reducir aquellas partidas que están relacionadas con el mantenimiento y funcionamiento
adecuado de los servicios sanitarios, educativos y sociales, y van en contra de la propia
naturaleza y esencia del proyecto de presupuestos que ha presentado el Gobierno.
Por su parte, las enmiendas de Ciudadanos, que alteran también la distribución económica del
presupuesto, lo hacen a costa del capítulo 2 y del capítulo 7, lo que se refiere a aquellas
inversiones destinadas a otras entidades por su interés social o utilidad pública.
En definitiva, creo que tanto el Grupo Popular como Ciudadanos tienen, en números redondos,
un 99 % de razones para apoyar este presupuesto, ya que disiente, tanto desde el punto de vista
de los objetivos de política económica que pretendemos conseguir como desde el punto de vista
de la distribución económica, de manera muy reducida respecto al proyecto que ha presentado el
Gobierno, y desde luego que estaría en condiciones de decirle que decida el Gobierno, que
están de acuerdo con esos dos grandes objetivos que nos hemos marcado, de generar riqueza y
su redistribución para consolidar el estado del bienestar.
Señorías, estamos ante un proyecto de presupuestos que les recuerdo que es expansivo en lo
social, que prioriza las políticas destinadas a financiar el estado de bienestar. Es un presupuesto
inversor, superando los 200 millones de euros destinados a infraestructuras, fundamentalmente
de carácter social.
Es un presupuesto responsable, porque su principal finalidad es cumplir con
los compromisos que hemos adquirido con los ciudadanos y ciudadanas de esta región, y, desde
luego, también es un presupuesto austero en relación al gasto de funcionamiento de la
Administración regional.
Tengo que decir a sus señorías que es un presupuesto riguroso en cuanto a los ingresos, ya
que los hemos estimado, desde la prudencia, en función de lo que realmente se va a recaudar.
Es un presupuesto equilibrado, porque, como también saben sus señorías, está diseñado para
cumplir con los objetivos de estabilidad presupuestaria marcados para 2020, y, por lo tanto, el
déficit es cero, y va a ser el primer presupuesto en el que no se incrementa el endeudamiento de
la Junta de Comunidades.
En definitiva, creo que ambas formaciones, Partido Popular y Ciudadanos, tienen suficientes
razones para que el proyecto de presupuestos sea posible aprobarlo por unanimidad, y, en este
sentido, creo que trasladaríamos a la ciudadanía un importante mensaje de que, además de
estabilidad política, esta región cuenta con una oposición constructiva, que apuesta también por
mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y de las ciudadanas de esta región a través de una
distribución de los recursos públicos que abre el camino hacia la plena modernización de la
economía regional y a la prestación de unos servicios públicos de calidad.
Muchas gracias.
(Aplausos).
SEÑOR PRESIDENTE DE LAS CORTES: Muchas gracias, señor Ruiz Molina.
Tiene la palabra don Fernando Mora Rodríguez como ponente designado por la comisión para
la defensa del Dictamen, por tiempo máximo de 15 minutos.
DON FERNANDO MORA RODRÍGUEZ: Señor presidente. Señoras y señores consejeros.
Señoras y señores diputados.
Estamos en una de las tareas fundamentales de un Parlamento, que es la aprobación de unos
presupuestos. La tarea de debatir, de enmendar y de aprobar los presupuestos sin duda es algo
que espera la ciudadanía, y lo espera fundamentalmente porque de ello se deriva el hecho de
que podamos prestar servicios a todos ellos de una forma eficaz, de una forma eficiente, de una
forma austera.
Ni Castilla-La Mancha ni los castellanomanchegos podían esperar a no aprobar estos
presupuestos, por el hecho de que las circunstancias, a nivel nacional, no se hayan incardinado
a dar una solución para la aprobación de unos Presupuestos Generales del Estado. Otras
comunidades autónomas lo han hecho, han esperado, no los han aprobado, otras evidentemente
sí, pero nosotros los vamos a aprobar en tiempo y en forma.
Fueron presentados en tiempo, fueron presentados en forma, y van a ser aprobados antes de
que finalice este ejercicio. Había que hacerlo, porque nuestra región necesita orientación,
objetivos, estabilidad, cohesión, y nuestros ciudadanos precisan que Castilla-La Mancha avance,
y estos presupuestos cumplen con todo ello.
Señoras y señores diputados, estamos progresando adecuadamente. Seguimos en la senda
de la recuperación y el buen camino. Estos presupuestos dibujan una Castilla-La Mancha
diferente. Estos presupuestos tienen un claro y alto compromiso social.
La Castilla-La Mancha real está representada en este texto.
Las propuestas, los planes, los
compromisos electorales y programáticos, y los realizados en el debate de investidura por el
presidente de Castilla-La Mancha, se van concretando, afortunadamente, porque así debía de
ser y así es. Se fueron concretando a lo largo de la pasada legislatura y se siguen concretando a
lo largo de la presente legislatura, y no hay mayor concreción que la aprobación de unos
presupuestos.
Estos presupuestos se caracterizan por el alto grado de contenido social, por continuar en el
compromiso de restaurar derechos en otros tiempos cercenados, y, sobre todo, por pensar en
nuestra gente, por pensar en los ciudadanos y ciudadanas de Castilla-La Mancha, por hacerlo
desde una firme apuesta por la igualdad y la solidaridad, y siempre del lado de quienes más lo
necesitan.
Es un paso más en la difícil y complicada restauración del modelo de estado de
bienestar.
Este es un presupuesto cercano, de diálogo, abierto al conjunto de la sociedad, esa que vive,
labora y siente desde el este al oeste, del norte al sur de nuestra región. A veces, los tiempos
son duros y complicados, y los ecos de la gran recesión del 2008 aún perduran. Es más, todavía
colean algunas repercusiones sociales y económicas en muchas familias, pero, desde luego,
estamos seguros de que no estamos frente a lo que otros desean: ante una nueva crisis.
Muchos de los recortes, a veces tremendamente injustificados en otro tiempo, lo fueron sin
medir las repercusiones económicas y sociales, afectando a empresas, a personas y a familias.
No se debió hacer a costa de quienes perdían su empleo, de quienes perdían su salud o de
quienes veían afectados sus derechos a la educación o al bienestar social. Cuando más
necesaria era la solidaridad, se dejó abandonados a los castellanomanchegos.
Los presupuestos que se han dictaminado suponen ahora un nuevo avance en la recuperación
económica y social, de nuestra gente, de nuestra tierra, dejando atrás otros tiempos. Son
servicios fundamentales, esenciales, esos que van unidos a los derechos que todos tenemos.
Son unos presupuestos austeros, eficientes, eficaces, solidarios, justos y equitativos.
Nuestra gente espera, de todos nosotros, que les resolvamos los problemas, que hagamos
más fácil su vida cotidiana, no quieren ni que la política sea un barullo, ni una discusión de
absurdos, ni un latrocinio, ni que les creemos problemas. Desde el legítimo acuerdo hasta
quienes están legitimados para el desacuerdo, ahí nos quiere ver la gente: un Gobierno abierto,
comprometido e ilusionante, y en eso, ese Gobierno tiene nuestro apoyo.
Los políticos que crean problemas, ni ayudan ni resuelven, y esto se da hoy con exceso en
nuestra querida España.
(Aplausos).
Tampoco resuelven nada quienes reducen sus políticas a manidos eslóganes, a frases
reiteradas, fútiles e inútiles, a inconsistentes rabietas, a quienes confían más en la coyuntura que
en sus propios esfuerzos, o reducen la política a las descalificaciones personales, al marketing
impersonal o a mensajes preparados por gabinetes de comunicación o mensajes de tuits de 280
caracteres.
No quisiera pasar por alto sin hacer referencia a la necesidad de diálogo, de las buenas
maneras, del entendimiento, del respeto, algo que viene caracterizando a esta Cámara en lo que
va de legislatura.
Desgraciadamente, no fue posible en otras.
Debemos, por tanto, hacer un esfuerzo por respetarnos. Por eso, creo que no vendría mal que
el diputado Benjamín Prieto se disculpase públicamente, como ya lo ha hecho el presidente del
Partido Popular, por él, no ya por las inconvenientes palabras en Fitur, sino por ratificarse en
ellas en un tuit que creo desafortunado.
(Aplausos).
El camino de la recuperación de nuestra región se inició en el año 2015, y ha continuado
durante la pasada legislatura. Desde entonces, el PIB ha venido creciendo.
Hoy, pese a una ligera desaceleración de las economías occidentales, nuestra región crece y
tiene previsiones de crecimiento no solo por encima de la media nacional, sino también de la
media europea.
Pero vamos bien. Las previsiones de los servicios de estudios del BBVA o de CEPREDE nos
siguen situando por encima de la media nacional. El recién publicado termómetro económico de
Castilla-La Mancha, hecho público el pasado lunes por la Fundación Eurocaja Rural y la
Universidad de Castilla-La Mancha, se ratifica en ello, como también lo hacen los informes de la
AIREF y de la Caixa.
No voy a entrar en esos números, pero, desde luego, sí les puedo señalar que creo que hay
una tendencia, que empieza a consolidarse, de que esa crisis o esa desaceleración que se venía
anunciando, parece que no puede ser tanto.
Estados Unidos y China ponderan la amenaza en la subida de los aranceles.
Las elecciones
del Reino Unido clarifican el futuro de la Unión Europea sin Gran Bretaña, despejando esa
incertidumbre. La recuperación de la economía alemana en el tercer trimestre ha evitado la
recesión en ese importante país de la Unión Europea.
La recuperación de las economías de los
países emergentes y una mayor confianza empresarial. Si a eso se une la formación de un
Gobierno estable en España, y con una oposición responsable, sin duda se dará el paso
importante para la evolución positiva de la economía del conjunto, y, por ende, también de
Castilla-La Mancha.
De hecho, los principales bancos centrales ya vaticinan que en el año 2020
la economía mundial puede prolongar su crecimiento hasta el 3,1 %.
Estos presupuestos recogen las nuevas tendencias que pululan por el mundo. Las nuevas
tendencias, como la economía verde, la tecnología o las infraestructuras.
Hay razones para el
optimismo, y estén ustedes tranquilos: en absoluto nos encontramos ante un escenario parecido
al de la burbuja inmobiliaria que provocó la gran recesión del 2008, a pesar de que algunos
parece que rezan por que ello pudiese ocurrir.
Estos presupuestos generan riqueza y distribuyen esa riqueza. Por eso son progresistas, por
eso son solidarios. Incentivan el crecimiento económico y crean empleo, cambian el modelo
productivo desde la innovación y el conocimiento tecnológico, promueven la competitividad
empresarial y son sostenibles medioambientalmente, y eso se traduce en que continuamos con
la recuperación y consolidación del estado del bienestar, mejorando la calidad y la modernización
de los servicios públicos, apoyando la igualdad de oportunidades de nuestra gente, para que
todos tengan los mismos derechos y oportunidades, vivan donde vivan, y afrontando así el reto y
la lucha contra la despoblación.
Para ello nuestro compromiso firme es la congelación del esfuerzo fiscal.
No habrá subida de
impuestos, y nos comprometemos firmemente con la estabilidad presupuestaria. Hoy hay
seguridad, esperanza y se genera ilusión en la ciudadanía. No puede haber lugar para el
desánimo si queremos avanzar, si queremos creer en el futuro de nuestra gente.
El Gobierno que lidera Emiliano García-Page es un instrumento impulsor y necesario para que
la economía de Castilla-La Mancha siga avanzando en la creación de empleo, para que los
empresarios y los emprendedores puedan generar riqueza, para que a los autónomos les vaya
bien, y les vaya también bien a los trabajadores y al conjunto de la ciudadanía.
Es bueno que se
continúe confiando en Castilla-La Mancha como lugar apropiado para invertir y dar seguridad a
esas inversiones.
Ya se ha referido el consejero a las grandes cifras de estos presupuestos, y, por tanto, no las
voy a reiterar.
Pero, desde luego, lo que ponen en evidencia es algo importantísimo: que el 71,2
% del gasto no financiero de los presupuestos de la comunidad autónoma, el 71,2 %, repito, está
destinado a consolidar los gastos relativos a la consolidación del estado del bienestar. Andalucía
ha presumido hace unos días, cuando se aprobaban sus presupuestos, de que el 58,7 % iba
destinado a gasto relacionado con el estado del bienestar, con el gasto social.
Fíjense ustedes: 71,2 % Castilla-La Mancha, 58,7 % en Andalucía. Creo que hay una gran
diferencia. Creo que hay un gran compromiso de un Gobierno progresista y solidario, con un
Gobierno, como el andaluz, que tiene otros derroteros.
(Aplausos).
Nos parece importante seguir trabajando por Castilla-La Mancha, y seguir trabajando de una
forma fehaciente.
Las enmiendas que se han desechado de los otros grupos, particularmente algunas, estaban
hechas sinceramente al peso, y yo creo que no se puede venir aquí a presentar enmiendas al
peso. Hay que presentar enmiendas creíbles. Otras que, siendo creíbles, no estaban bien orientadas, porque detraían recursos de cuestiones y planteamientos presupuestarios
absolutamente necesarios para que la comunidad autónoma funcione.
Vamos a trabajar por la ciudadanía.
Doy las gracias porque todo lo estamos haciendo. Pero,
desde luego, el Grupo Socialista y este Gobierno lo están haciendo con plena convicción, y
creyéndonos lo que hacemos, y pensando que las cosas se pueden hacer bien.
Cuando ustedes intervengan posteriormente, seguramente nos hablarán de algunas
enmiendas que no se debatieron, como es el tema de la manida rebaja fiscal. Una manida rebaja
fiscal absolutamente ilusoria, absolutamente fantasmagórica, que, de aplicarse, lo único que nos
llevaría sería a muchos más recortes en sanidad, en bienestar social, en educación, y para el
personal y los empleados públicos que trabajan en esos sectores.
La bajada de impuestos, y menos en una comunidad autónoma como Castilla-La Mancha, no
conduce precisamente a ningún tipo de recuperación económica, sino todo lo contrario. Por
tanto, ese tema hay que abordarlo en los ámbitos correspondientes, en un modelo de
financiación que tiene que ser eficaz, adecuado, igualitario y consistente, para que nadie, ni un
ciudadano, pueda ser más o menos que otro dependiendo del lugar en el que viva.
No me voy a extender mucho más. Simplemente hacer una referencia a cómo el Gobierno de
Castilla-La Mancha también está comprometido con el empleo público, y la última oferta de
empleo público lo pone en evidencia, con la convocatoria de 12.301 plazas en el conjunto del
quinquenio que llevamos gobernando, y 2.573 plazas en esta oferta pública de empleo.
No quisiera acabar sin hablar de un tema que a mí me parece fundamental, que también está
contemplado en los presupuestos, que es algo importante: las políticas de igualdad, y en
particular, sobre la importancia que tiene el erradicar la violencia de género, los comportamientos
machistas, así como las ideologías supremacistas y retrógradas, y quienes las auspician y las
amparan.
(Aplausos).
SEÑOR PRESIDENTE DE LAS CORTES: Señor Mora, le ruego que vaya concluyendo.
DON FERNANDO MORA RODRÍGUEZ: Sí. Un minuto, señor presidente.
Tenemos que erradicar ese infame comportamiento que degrada a la mujer y envilece al
conjunto de la sociedad, y para ello hay un presupuesto adecuado.
Tenemos que trabajar todos juntos en crear la conciencia social precisa para su erradicación
total. La lucha contra la violencia de género seguirá siendo dura, pero en ella debe estar toda la
sociedad unida, no debe haber ni un solo resquicio ni un ápice de justificación de ese tipo de
comportamientos.
Hombres y mujeres somos iguales ante la ley, poseemos los mismos
derechos, y es una infamia que en un mundo civilizado se perpetúen comportamientos que no
son propios de nuestro tiempo. La mujer es la otra mitad de la sociedad, que con el hombre
completan un todo para construir una sociedad de iguales.
Quisiera terminar con una estrofa de un bello poema: “Nos ocupamos del mar, y tenemos
dividida la tarea: ella cuida de las olas, yo vigilo la marea”.
Hay muchísimas cosas que decir, pero ya y por resumir, el Dictamen que hoy debatimos fue
aprobado por la Comisión de Economía y Presupuestos, el pasado día 19...
SEÑOR PRESIDENTE DE LAS CORTES: Señor Mora, le ruego que vaya concluyendo, por
favor.
DON FERNANDO MORA RODRÍGUEZ: Termino con los datos del Dictamen, y cierro.
En dicha comisión fueron debatidas 308 enmiendas, 232 del Partido Popular, 60 del Grupo
Parlamentario de Ciudadanos y 16 del Grupo Socialista. De todas ellas, fueron aprobadas 17: 2
de ellas por unanimidad de todos los grupos y otras 5 con el apoyo de 5 diputados y la
abstención de otros 2, y las 10 restantes lo fueron con los votos de los diputados del Grupo
Socialista.
Se retiraron 2 enmiendas por parte del Grupo Popular.
Se aprobaron 89 artículos, disposiciones y anexos que no mantenían enmienda de ningún
grupo, y, obviamente, también fueron aprobados el resto de los artículos, disposiciones y anexos, así como la exposición de motivos que mantienen enmiendas de los grupos Popular y
Ciudadanos, quedando aprobado el gasto de toda la sección.
También quedó aprobado por la comisión el estado de ingresos. Las enmiendas vivas de los
dos grupos de la oposición serán las que debatamos a lo largo del día de hoy.
Muchas gracias.
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