Sánchez: Ahora toca volver a poner en marcha el país y su reconstrucción económica y social sin olvidar que el virus sigue al acecho
Pide “responsabilidad”, “altura de miras y patriotismo” a los partidos españoles en Europa para apoyar el Fondo de Reconstrucción de 750.000 M€ y advierte: “si España pierde, no solo pierde el Gobierno, todos perdemos”.
“La amenaza de la pandemia sigue presente. La pandemia no ha terminado”, ha recalcado este domingo el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que también ha apostado por comenzar “la reconstrucción”, “la recuperación” del país cuanto antes sin olvidar “que el virus sigue al acecho”. “Toca volver a poner en marcha el país, la reconstrucción económica y social de España”.
La reconstrucción social y económica tiene una dimensión social, ha remarcado el Presidente porque “significa recuperación de la confianza de los consumidores, de los empresarios” pero no se puede olvidar el “significado económico rotundo”: “Significa recuperación de la actividad económica; significa recuperación del empleo.
EUROPA
En definitiva, Reconstrucción equivale a recuperación de la seguridad en que nuestra economía y nuestra sociedad se pondrá en pie y reanudaremos la marcha con fuerza”. Por eso ha destacado Sánchez la importancia del Fondo de Reconstrucción Europeo con 750.000 millones de euros y ha pedido unidad: “Quiero pedir públicamente a todos los partidos españoles que apoyen activamente la Propuesta de la Comisión Europea dentro de sus familias políticas respectivas, para que sea aprobada en el Consejo Europeo, y se pueda poner en marcha lo antes posible. Además de justo es capital para nuestra recuperación”. “Si España gana, todos ganamos: trabajadores, autónomos, grandes y pequeñas empresas. Si España pierde, no solo pierde el Gobierno, todos perdemos. Nadie puede soñar con sacar un beneficio dañando a los intereses de España y de los españoles. Pido responsabilidad, pido altura de miras y pido patriotismo”.
AUTOMOCIÓN Y TURISMO
Pedro Sánchez ha comparecido ante los medios tras su reunión con los presidentes autonómicos. Les ha trasladado que dos sectores económicos cruciales para la economía española, la automoción y el turismo, tendrán un respaldo prioritario durante la Reconstrucción.
En el caso de la automoción, el Gobierno anunciará el lunes el plan, pero Sánchez ha avanzado que constará de un presupuesto de 3.750 millones de euros y también ha anunciado que habrá “financiación para la renovación del parque de vehículos”, incentivando “especialmente los vehículos eléctricos” y con “ayudas especiales” a las familias de menos recursos para que nadie quede atrás en este proceso.
En cuanto al turismo, también ha avanzado el presidente del Gobierno que el jueves se presentará el Plan de Impulso del Turismo, diseñado junto a los representantes del sector y con la coordinación de las Comunidades Autónomas. Sánchez además, ha confirmado que el 21 de junio “España levantará los controles fronterizos con los Estados Miembros”, coincidiendo con el fin del Estado de Alarma. Y a partir del 1 de julio se abrirán las fronteras “escalonadamente” con terceros países, que tendrán que cumplir una serie de requisitos: su situación epidemiológica deberá ser análoga o mejor a la de la Unión Europea; deberán asumir ciertas condiciones sanitarias en origen, trayecto y destino y deberán actuar con reciprocidad. “Las fronteras se abren. Se abren con seguridad y de modo gradual. Queremos que turismo y seguridad sanitaria vayan de la mano. Turismo, sí; intercambio, sí; apertura, sí. Seguridad y salud, también”, ha cerrado Sánchez.
EDUCACIÓN
El Presidente también ha remarcado la importancia de un retorno a las aulas seguro a partir de septiembre. “Cada centro educativo abrirá en septiembre con un Plan de Inicio de Curso y un Plan de Contingencia que detallará las actuaciones y los mecanismos necesarios de cara a cualquier incidencia”.
Ha recordado que 2.000 millones de los 16.000 del Fondo no reembolsable a las comunidades autónomas se dirigirán precisamente a educación. “En septiembre, cuando los niños y las niñas vuelvan al colegio, tanto la sanidad como la educación públicas deberán encontrarse fortalecidas, revitalizadas y reorganizadas”.
VIOLENCIA DE GÉNERO
El presidente del Gobierno ha comenzado su intervención condenando el último asesinato machista, una mujer y sus dos hijos en Úbeda esta misma mañana. Ha pedido seguir defendiendo la vida de "tantas y tantas mujeres que merecen ser felices y libres". Ha señalado que el Gobierno y la sociedad "sienten profundamente" la pérdida de estas tres vidas y ha repetido que la mejor manera de rendirles homenaje es que las instituciones sigan "luchando contundentemente" para que no haya más víctimas.
Ha subrayado hay que seguir defendiendo la vida de las mujeres e igualmente trabajar para que no haya más infancias destruidas, porque "los menores también tienen derecho a una vida digna y libre de violencias".
COMPARECENCIA PEDRO SÁNCHEZ
En primer lugar me gustaría que lo primero que haga sea mostrar la solidaridad del conjunto del Gobierno -y la mía propia- con las familias de las tres víctimas mortales registradas hoy en Úbeda, en Jaén, en lo que parece un nuevo caso, desgraciadamente, de violencia de género. Hablamos de María Belén de 46 años y de sus dos hijos de 12 y de 17 años.
El Gobierno, como el conjunto de la sociedad española, siente profundamente la pérdida de éstas tres vidas. Reconozco que la mejor manera de rendir homenaje a las víctimas es seguir luchando contundentemente como estamos haciendo el conjunto de instituciones para que no haya ninguna víctima más.
Hay que seguir defendiendo la vida de tantas y tantas mujeres que merecen ser felices, libres e igualmente seguiremos trabajando para que no haya más infancias destruidas. Los menores también tienen derecho a una vida digna y libre de violencia.
Estos últimos días hemos recuperado una buena parte de la normalidad en nuestras vidas. Después de estos meses tan duros, tan dramáticos, tan difíciles que hemos atravesado necesitábamos volver a pisar nuestras ciudades, nuestros pueblos; nos hacía falta traspasar las puertas de las tiendas y los bares; necesitábamos volver a mirarnos cara a cara con nuestros amigos, con los compañeros de trabajo, con los familiares. Nos hacía ya falta volver a practicar el ejercicio y también volver a apasionarnos con las competiciones deportivas como estamos viendo en éstos últimos días.
Pero este alivio que tanto necesitábamos no puede hacernos olvidar dos cosas muy importantes que me gustaría subrayar: La primera es la amenaza, la amenaza que no ha desaparecido de un virus que sigue al acecho.
Ésa es la primera de las cuestiones que me gustaría compartir con todos ustedes. Y la segunda es que ahora toca volver a poner en marcha el país con total rotundidad, la reconstrucción económica y social de España.
La amenaza de la pandemia, como saben ustedes, sigue presente. La pandemia no ha terminado. Basta volver la vista a lo que sucede hoy mismo en América del Norte y en América del Sur para poder comprobarlo. Un solo dato nos permite comprender la magnitud del desafío que todavía tenemos como humanidad que abordar conjuntamente, y es que el pasado día 13 de marzo cuando anuncié el Estado de Alarma, se reportaron en todo el mundo, en todo el mundo, 10.000 nuevos casos diarios de contagio y 500 muertes diarias.
Ayer, el número de nuevos casos que se reportaron en el mundo fue de 150.000; y también el número de fallecimientos ascendió a 5.000 diarios. Es decir, la pandemia es 15 veces más feroz en el mundo que hace tres meses, las víctimas mortales ayer fueron 10 veces más que el pasado 13 de marzo cuando decretamos el Estado de Alarma en nuestro país.
Es cierto que hemos conseguido entre todos y con muchísimo esfuerzo doblegar la curva de contagios y hemos logrado arrinconar al virus en nuestro país y también en el continente europeo, y el epicentro se ha desplazado a otras latitudes mucho más lejanas.
Pero el riesgo no ha desaparecido. Una segunda ola, nos dicen todos los expertos, es posible. Es un riesgo cierto y debemos evitarlo a toda costa porque nos llevaría contra el muro. Y depende de cada uno de nosotros evitarlo.
Ciertamente debemos prepararnos mejor frente a ese riesgo en el futuro cercano y también en el futuro más lejano. Y precisamente por eso debemos aprender de esta conmoción, por si el mundo sufre una nueva calamidad de estas características. Debemos extraer todas las lecciones de lo que ha funcionado mejor y también, lógicamente, aquellas cuestiones que peor han funcionado.
Evaluar deficiencias de nuestro sistema sanitario, las fragilidades de nuestro sistema de asistencia a mayores, de nuestra capacidad industrial para dotarnos de equipos de atención y protección.
Debemos evaluar las fortalezas de nuestros sistemas de telecomunicaciones, de energías, de aprovisionamiento de alimentos; el gran potencial de nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, las Fuerzas Armadas, en definitiva del conjunto de servidores públicos que han estado durante estas semanas tan largas al frente y en primera línea. Y también debemos evaluar las fragilidades que arrastramos en el teletrabajo, en educación no presencial, el problema de la brecha digital que ha dejado descolgados a quienes no acceden a internet, no solamente desde el punto de vista de los recursos de renta sino también desde el punto de vista territorial.
De todo eso deberá ocuparse una Comisión Parlamentaria que propuse esta semana misma en el Congreso de los Diputados. Una Comisión Parlamentaria de Evaluación que impulsaremos de inmediato cuando sea levantado el Estado de Alarma el próximo 21 de junio. En definitiva lo que tenemos que hacer es aprender de la emergencia para prepararnos mejor.
Esa debe ser la máxima que nos guíe, que guíe al conjunto de fuerzas parlamentarias que vayan a participar en esa comisión parlamentaria de evaluación de la crisis del Covid. Pero, además de examinar lo sucedido, nos aguarda una segunda tarea fundamental y es la puesta en marcha del país a pleno rendimiento y la reconstrucción y recuperación social y económica de nuestro país.
Precisamente de ello quiero hablarles hoy para centrarme en tres aspectos muy relevantes que he tratado en la décimo cuarta ya Conferencia de presidentes y presidentas autonómicos que hemos mantenido a lo largo de esta misma mañana.
En primer lugar, la educación y la vuelta a las aulas en el mes de septiembre. En segundo lugar, el relanzamiento de la industria y la necesidad de un plan específico para el sector de la automoción y también para el sector del turismo. Y en tercer lugar, la apertura de fronteras y en consecuencia vincularlo con el plan de apoyo al turismo al cual antes he hecho referencia.
En el ámbito de la educación estos meses de crisis y de vida detenida han sido especialmente duros para los más jóvenes, para los niños y niñas que han visto paralizadas sus vidas, su entorno social y afectivo y su relación con el exterior.
Han tenido el refugio de sus familias, pero han perdido la conexión con sus compañeros y su vínculo ordinario con sus profesores, con sus maestros. Este parón forzado de la educación presencial ha puesto de manifiesto dos carencias que me gustaría compartir con todos ustedes.
En primer lugar la brecha digital. Muchas familias carecen de los dispositivos o de la conexión o del conocimiento para trasladar el aprendizaje desde el aula al hogar. Y en segundo lugar, la conciliación familiar, la corresponsabilidad familiar, cómo se compatibiliza el trabajo de los padres y madres y el cuidado de los niños y niñas.
De estas carencias deberemos ocuparnos en esa Comisión Parlamentaria de Evaluación a la cual antes hice referencia y mencioné y que deberá proponer medidas de alcance para el futuro.
Pero además ahora tenemos que organizar y preparar esa vuelta tan necesaria e imprescindible a las aulas, en coordinación con las Comunidades Autónomas, que son, como todos ustedes saben, quienes tienen las competencias, como sucede también con la Sanidad, en la gestión de la Educación.
Los Ministerios de Sanidad y Educación y Formación Profesional a lo largo de estas últimas semanas han estado trabajando codo con codo y han elaborado un documento marco que fue presentado esta semana que estamos terminando y discutido con los consejeros y consejeras de educación de los distintos gobiernos autonómicos y cuyo único propósito es establecer lo que digamos corresponde al Gobierno de España que son recomendaciones a las autoridades competentes en materia educativa que son las Comunidades Autónomas.
Las clases se reanudarán en septiembre y gracias a estas recomendaciones y al trabajo conjunto que está haciendo el ministerio de Sanidad, el ministerio de Educación y Formación Profesional junto con las Comunidades Autónomas esa vuelta en el mes de septiembre será en un entorno seguro y saludable.
Las medidas definidas procuran reducir los riesgos de contagio, reforzando por ejemplo la educación para la salud, limitando los contactos, fomentando la higiene personal, y ventilando los espacios. Y a la vez, se recomiendan medidas para gestionar los casos de contagio que pudieran producirse en los colegios.
Cada centro educativo, a partir del mes de septiembre, tendrá que abrir en con un Plan de Inicio de Curso y con un Plan de Contingencia que detallará las actuaciones y los mecanismos necesarios de cara a cualquier tipo de incidencia. Se prevé que exista en cada centro una persona de referencia para los aspectos relacionados con la Covid-19 y un equipo formado por distintos representantes de la comunidad educativa que garantice la información y el cumplimiento de los principios.
En Educación Infantil y hasta 4º de Primaria incluido, se ha determinado que se establezcan grupos estables de alumnado, preferiblemente de 15 alumnos, aunque podrían llegar hasta 20 alumnos. Se trata de recomendaciones que hemos planteado al conjunto de Comunidades Autónomas. Para el resto de los cursos, los espacios se reorganizarán de forma que haya una distancia de un metro y medio entre los alumnos y alumnas.
La mascarilla será obligatoria a partir de 5º de Primaria; y también en los 4 cursos anteriores, cuando los alumnos alumnas no estén con su grupo estable de convivencia. En Educación Infantil no será obligatoria la mascarilla.
Se priorizará, además, la utilización de espacios al aire libre para actividades educativas y también de ocio. También deben saber que existe un protocolo pautado para la gestión de los posibles casos que presenten síntomas compatibles con la enfermedad del Covid. Salud Pública será la encargada de la identificación y seguimiento de los contactos según el protocolo de vigilancia y control vigente en la Comunidad Autónoma correspondiente.
Y desde el Gobierno de España, consideramos que es absolutamente prioritario garantizar la vuelta a las aulas de todos los alumnos y alumnas. Ya la interrupción brusca del curso fue un golpe duro para nuestros alumnos, también para las familias. Y este daño no se expresa en cifras económicas ni tampoco de negocio, pero es una herida que afecta a generaciones de muchachos y muchachas y que no podemos permitir que se ahonde.
Somos, en todo caso, conscientes de la dificultad de adaptar los centros a esta nueva situación. Como sucede también en los centros de trabajo y en los lugares de recreo o en el comercio. Pero, tal y como he solicitado a los presidentes y presidentas autonómicas, es indispensable trabajar en ello en beneficio de todos los ciudadanos y sobre todo de los niños y niñas, de los menores que merecen volver con todas las garantías al curso escolar a partir del mes de septiembre.
El Gobierno de España está haciendo de su parte no solamente elaborando estas recomendaciones pare el conjunto de las Comunidades Autónomas, también, y no me quiero olvidar de la comunidad educativa, de los profesores, de los padres, madres y también lógicamente de los alumnos. Y en otro ámbito de cosas, el Gobierno, como saben ustedes anunció -vamos a aprobarlo en los próximos días- un fondo no reembolsable de 16.000 millones de euros para las Comunidades Autónomas.
Y de esta inyección de recursos, como saben, 9.000 millones de euros deberán ser destinados a la sanidad, pero 2.000 millones de euros, esto era lo importante que quería reseñarles, se dirigirán precisamente a educación.
Porque en septiembre, cuando los niños y las niñas vuelvan al colegio, tanto la sanidad como la educación públicas deberán encontrarse fortalecidas, revitalizadas, reorganizadas. Son, en definitiva absolutamente esenciales esa protección y esa garantía de salud y libertad. Sin ellas, no será posible una verdadera reconstrucción y recuperación en nuestro país.
En segundo lugar, en relación con el sector de la automoción ha habido diferentes presidentes y presidentas autonómicos que a lo largo de estas semanas, también en una interlocución que hemos tenido directa con el sector del automóvil, trabajadores, empresas a través del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, hemos estado elaborando este plan para defender al sector de la automoción en este momento tan crítico que han atravesado como consecuencia del parón y de la caída de la demanda.
No es necesario explicar la importancia que tiene para España la industria de la automoción. Representa hasta una décima parte de nuestro Producto Interior Bruto y casi un quinto de todas nuestras exportaciones.
Emplea a 650.000 personas de manera directa y casi dos millones de puestos de trabajo en total están ligados al sector de manera directa o de manera indirecta. Y no es necesario tampoco explicar a estas alturas la importancia que tiene la transición ecológica de nuestra economía en una época en la que la emergencia climática es uno de los principales problemas, desafíos del conjunto de la humanidad.
El Gobierno ha trabajado de la mano con el sector para anticipar un plan integral que dé respuesta a sus necesidades y que sirva además para realizar esa transición ecológica urgente que se tiene que dar también en el ámbito de la movilidad.
Un plan destinado a acompañar al sector en la transición hacia una movilidad sostenible y conectada, dirigido a toda la cadena de valor industrial, para ayudarle a adaptarse y mantener la competitividad. Y coherente lógicamente con nuestros compromisos internacionales de lucha, adaptación y mitigación del cambio climático.
Queremos promover la estabilidad y el impulso en el sector de la automoción. Y los vehículos del futuro se parecerán muy poco a los del pasado en lo que se refiere a incidencia en el medio ambiente. Les avanzo que ese plan incluye medidas para preparar la industria.
- En primer lugar con inversiones y reformas legales.
- En segundo lugar con el estímulo a la investigación y la innovación.
- En tercer lugar con una fiscalidad que le dote de mayor competitividad.
- Y por último con formación y cualificación profesional para dotar de recursos humanos a la industria.
También resultarán beneficiados los empresarios, los trabajadores y trabajadoras autónomos, a través de los ahorros en combustible que comportará la renovación de su flota.
Este impulso a la industria no tiene por objeto retroceder a tiempos pasados. Al contrario, facilitará la renovación del parque de vehículos para que sea más eficiente y más conforme a los objetivos de transición energética que nos hemos propuesto.
Los objetivos son muy ambiciosos: llegar a cero emisiones en el año 2050, en línea con los postulados del nuestro Plan Nacional de Energía y Clima, del anteproyecto de ley que hemos enviado al Congreso de los Diputados de Ley de Cambio Climático y por supuesto también, con el Pacto Verde a nivel europeo que muchos países estamos impulsando.
En resumen, estamos trabajando para que en el futuro tengamos mejores vehículos más sostenibles, ciudades más limpias, con un empleo de mayor calidad y con un sector mucho más competitivo. Esos objetivos están en el horizonte de nuestra acción y la colaboración público-privada los harán posibles.
Plan de turismo y fronteras
En tercer lugar, querría hablarles del Plan de Turismo, que es otro de los sectores que se han visto dañados como consecuencia del cierre de fronteras, del confinamiento y de las restricciones de movilidad. Y lógicamente también los anuncios que he planteado a los presidentes y presidentas autonómicos en relación a la apertura de nuestras fronteras.
Si la automoción es un sector estratégico para nuestro país, como dije antes, no lo es menos el turismo que ha sido uno de los más afectados en la emergencia sanitaria debido a las inevitables restricciones de movilidad que tantas vidas han salvado.
El turismo supone más del 12% del PIB y del empleo en nuestro país. Es un hecho que cualquier crisis en el turismo acarrea consecuencias gravísimas sobre la economía española y sobre las familias de nuestro país que se dedican a este sector. Pero el turismo es además un sector clave para la recuperación de nuestra economía.
Lo fue en la crisis de 2008. Y lo volverá a ser ahora. Como en la automoción, la superación de esta crisis no puede llevarnos al punto anterior. Hemos de aprovecharla para transformar nuestras grandes fortalezas de nuestra oferta turística para impulsar, en definitiva, una renovación urbana y hacerla más sostenible desde el punto de vista también medioambiental.
Con ese objetivo, el Gobierno presentará el próximo jueves un Plan de Impulso del Turismo, diseñado junto con los representantes del sector y con la coordinación de las Comunidades Autónomas.
La recuperación de la actividad turística será prioritaria para el Gobierno de España. Nos aseguraremos de que el desarrollo del turismo contribuya a afianzar los territorios en riesgo de despoblación.
Mejoraremos las condiciones de empleo, reduciendo la precariedad y la brecha de género. Y fomentaremos con estos planes la convivencia entre la población turística y la población autóctona con la máxima seguridad sanitaria. España no es cualquier país cuando se trata de turismo. Ni en cantidad ni en calidad.
Somos el segundo país del mundo por número de visitantes y por gasto turístico. Y lideramos desde hace 5 años el Índice de Competitividad Turística elaborado por el Foro Económico Mundial.
No me cabe la menor duda de que con el esfuerzo conjunto de empresas, trabajadores y lógicamente también instituciones públicas y al frente el Gobierno de España, consolidaremos este liderazgo. Y para ello tenemos que contar con la reapertura de nuestras fronteras, que es inminente. Gracias a la iniciativa conjunta de los Gobiernos de España y de Italia, la Comisión Europea ha establecido un orden de reapertura escalonado.
Primero, se abrirán las fronteras internas y después, se permitirán las entradas desde terceros países. Varios países ya han levantado parcialmente sus controles fronterizos internos. Y la Comisión ha recomendado a los demás países que hagan lo propio a partir de mañana, 15 de junio.
Asimismo, ha recomendado prolongar la restricción de viajes no esenciales desde terceros países hasta final de mes, es decir hasta el 30 de junio. Durante ese tiempo, se preparará una lista de países seguros con los que se pueden levantar las restricciones a partir del 1 de julio.
Me gustaría decir que en un día como hoy, un 14 de junio de hace 35 años se firmaba el tratado de Schengen que abría el camino a la eliminación de los controles fronterizos y marcaba el futuro de la integración europea. No se me ocurre mejor forma de conmemorar este aniversario, precisamente hoy, otro 14 de junio, con el anuncio del restablecimiento de una de las libertades fundamentales que definen el ideal europeo.
En consonancia con los criterios de la Unión, con las peticiones del sector turístico, de Comunidades Autónomas y con la buena evolución, afortunadamente buena evolución de la emergencia sanitaria, puedo anunciarles que España levantará los controles fronterizos con todos los Estados Miembros el próximo 21 de junio, coincidiendo justamente con el fin del Estado de Alarma.
A partir de entonces, desaparecerá la obligación de cuarentena para los viajeros que entren en nuestro país. Se han llevado a cabo consultas con los Estados miembros vecinos, teniendo en cuenta la necesaria bilateralidad de las medidas a adoptar, y que estamos adoptando. Como resultado de estas consultas se mantienen los controles en las fronteras interiores terrestres con Portugal hasta el 30 de junio, tal y como nos han solicitado.
Ahora bien, dada la estrecha relación que tenemos con nuestro querido amigo y vecino portugués, hemos acordado celebrar un acto muy especial y emotivo de reapertura de fronteras entre los dos países a partir del próximo 1 de julio.
En dicho acto estará presente el Jefe del Estado, su Majestad el Rey, mi presencia también, el primer ministro portugués y el presidente de la República portuguesa. Eso será el 1 de julio en un acto que haremos en una ciudad española y en una ciudad portuguesa. Para esta próxima semana, por lo tanto, hemos puesto en marcha ya un proyecto piloto que implicará la llegada de 10.900 turistas alemanes a las Islas Baleares.
Una iniciativa con la que verificaremos todas las medidas de seguridad que aplicaremos en esta temporada turística. E, insisto, este es un proyecto piloto que nos servirá de mucho para aprender en los próximos meses. Queremos que nuestro país, que ya es reconocido como destino turístico de calidad, ahí están las cifras, sea reconocido además como destino turístico de seguridad, de seguridad en las calles y también sanitaria.
Posteriormente, a partir del día 1 de julio, se abrirán escalonadamente las fronteras con terceros países, de fuera de Schengen. No todos, por supuesto, sino los incluidos en una lista cuando cumplan tres requisitos: en primer lugar su situación epidemiológica deberá ser análoga o mejor a la de la Unión Europea; en segundo lugar deberán asumir ciertas condiciones sanitarias en origen, trayecto y destino; y deberán, por último, actuar con reciprocidad.
Es decir, deberán aceptar también el ingreso de viajeros procedentes de la Unión Europea. En suma, el 21 de junio se abren las fronteras, salvo con Portugal que se abre el 1 de julio. Se abren las fronteras con los países Schengen a partir del 1 de julio con Portugal y también, con terceros países con los que lleguemos a un acuerdo de reapertura de fronteras.
Se van a abrir con seguridad y de modo gradual. Queremos que turismo y seguridad sanitaria vayan de la mano. Turismo, sí; intercambio, sí; apertura, sí. Seguridad y salud, también. En más de una ocasión he insistido en que no hay que elegir entre salud y negocio, salud y economía, porque si se sacrifica la salud se resiente también el negocio y la economía como hemos visto durante estas semanas tan difíciles que hemos atravesado.
Más allá de estos sectores específicos a los que he hecho referencia antes, turismo, automoción y la vuelta al colegio de nuestros hijos e hijas a partir del mes de septiembre; la tarea reconstrucción debe abarcar a todos los campos y debe sostenerse en el máximo grado de unidad posible.
Unidad con sindicatos y empresarios en la Mesa para el Empleo; unidad entre el Gobierno y las Comunidades Autónomas, la propuesta que les he hecho a los presidentes autonómicos es celebrar una Conferencia Autonómica de presidentes monográfica y presencial a finales de julio, tras la celebración de las elecciones de País Vasco y Galicia; y también unidad de los Partidos políticos que forman parte de la Comisión Parlamentaria por la Reconstrucción que avanza en sus trabajos y en sus recomendaciones al Gobierno de España.
¿Qué sentido tiene hoy hablar de Reconstrucción y Recuperación Social y Económica? Tiene una dimensión social, desde luego, porque significa recuperación de la confianza de los consumidores, de los empresarios, de los trabajadores. Pero tiene también un significado económico rotundo. Significa recuperación de la actividad económica; significa recuperación del empleo.
En definitiva, Reconstrucción equivale a recuperación de la seguridad en que nuestra economía y nuestra sociedad se ponen en pie y reanudan la marcha con fuerza. La Reconstrucción, la recuperación, será más rápida con unidad; esto lo he defendido siempre, será más efectiva con unidad. Igual que sucederá en el espacio europeo.
Como saben, la Comisión Europea presentó hace unas semanas una propuesta de dotar un fondo para la reconstrucción europea que ha recibido el nombre de Nueva Generación Unión Europea, Next Generation EU.
La cuantía final de la propuesta de la Comisión asciende a 750.000 millones de euros: 500.000 en transferencias directas y 250.000 en préstamos. Están destinados a reactivar las economías más afectadas y a prestar apoyo a trabajadores, a autónomos, a PYMES, a profesionales sanitarios y a los sectores más golpeados como el del turismo o la cultura.
Esta propuesta cuenta con apoyos muy amplios dentro de los Estados miembros, pero no está todavía aprobada. Y encuentra reticencias en algunos países que se resisten a aceptar este avance que es esencial para la recuperación de los países más golpeados pero que en realidad redunda en beneficio de toda Europa.
Por eso, me gustaría pedir públicamente a todos los partidos españoles que apoyen activamente la propuesta de la Comisión Europea dentro de sus familias políticas respectivas, para que sea aprobada en el Consejo Europeo, y se pueda poner en marcha lo antes posible. Además de justo es capital para nuestra recuperación.
Si España gana, todos ganamos: trabajadores, autónomos, grandes y pequeñas empresas, economía social. Si España pierde, no solo pierde el Gobierno de España, todos perdemos. Nadie puede soñar con sacar un beneficio dañando a los intereses de España y del conjunto de ciudadanos. Pido responsabilidad, pido altura de miras y pido patriotismo.
Comenzaba esta intervención diciendo que no podemos olvidar los días más duros, pero mucho menos aún podemos olvidar —jamás lo haremos— a aquellos que ya no están junto a nosotros, a los que fallecieron en estos meses terribles que hemos atravesado. No estamos todos, no estamos todas. Faltan más de 27.000 compatriotas que murieron víctimas del COVID19. Son demasiadas personas las que faltan.
Demasiadas las que ya no están y que contribuyeron a hacer de España un país mejor. Y, tal como anuncié hace un mes, este país, su país, España, les guardará memoria siempre y les rendirá homenaje en una Ceremonia de Estado que se celebrará también en días posteriores al 12 de julio, que es el día de las elecciones en Galicia y en el País Vasco. Termino haciendo referencia a un proverbio oriental, para trasladarles alguna reflexión.
Hay un proverbio oriental muchas veces citado, que sostiene que “cuando soplan vientos fuertes, algunas personas se dedican a construir muros, mientras que otras construyen molinos”. Lo habrán escuchado muchas veces. Obviamente, nadie esperaba este vendaval. Pero ha llegado y nos ha sacudido, como ha golpeado a todo el mundo, como está golpeando a todo el mundo. Y solo hay dos respuestas posibles: ser muro o ser molino. División o transformación.
Ya antes de la pandemia sabíamos para qué servían los muros: para dividir, segregar, confrontar y separar.
Con la pandemia hemos visto alzarse otros muros: como es el del miedo, el engaño y el odio. Los muros no son la solución. Queda otra opción que es la de los molinos como dice el proverbio. Podemos utilizar la tempestad que hemos vivido y convertirla en una fuerza positiva. Una fuerza de transformación.
Una fuerza positiva para reencontrarnos forjando alianzas entre los más jóvenes y nuestros mayores, los más expuestos a los daños del virus; empresarios y trabajadores que quieren preservar y relanzar sus empresas y empleos; alianzas entre todos los pueblos de España; la unión de todas las fuerzas políticas con el objetivo de reconstruir y recuperar el empleo y el crecimiento económico.
En todos los territorios de España empezamos a disfrutar de esas cosas, muchas veces pequeñas, que dan sentido a la vida. Cosas que antes pensábamos que eran seguras y para siempre, y ahora sabemos que se pueden perder y lo costoso que es volver a conquistarlas. Hemos pagado como sociedad, como país, un precio muy alto para recuperar una parte de la normalidad de nuestras vidas.
Está en nuestras manos transformar toda esta aspereza y este dolor en algo que nos haga mejorar y nos fortalezca. Está en nuestras manos actuar, con constancia y humildad, para orillar lo que nos frena y lo que nos separa. Podemos hacer mejor, mucho mejor nuestro país, aprovechando el esfuerzo al que nos ha obligado esta desgracia.
Es esta esperanza de un futuro mejor la que nos mantuvo en pie a todos y a todas los días más duros de esta pandemia, y es esta esperanza la que tenemos que hacer realidad ahora. Muchas gracias por su atención, y muchas gracias también por su responsabilidad y generosidad.
REAL DECRETO LEY MEDIDAS CONTENCIÓN COVID - 19
No hay comentarios:
Publicar un comentario