domingo, 3 de abril de 2016

COMITÉ FEDERAL PSOE 2 ABRIL






Ante la “hora decisiva” y “sin margen para el error” que se abre a un mes de saber si España va a tener “un gobierno progresista” o habrá repetición de elecciones, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha realizado un llamamiento a “la unidad de todas las fuerzas del cambio”, alegando que “somos 15 millones de españoles, 199 escaños y tres formaciones políticas con un único objetivo compartido: el de renovar España”. Una idea ésta que “es mucho más poderosa que cualquier otro veto, exclusión o línea roja” que se pueda plantear en la “negociación a tres” entre PSOE, Podemos y Ciudadanos que comenzará la próxima semana.
  • Ante los miembros del Comité Federal, Pedro Sánchez ha señalado que nuestro país “necesita con urgencia un acuerdo que materialice ese gobierno del cambio que ansían muchos españoles”. 
  • Y es así, porque tenemos un Ejecutivo que “gobierna de espaldas a los ciudadanos” -pues “no acude al Congreso y evita la rendición de cuentas”- y “sobre las espaldas de los ciudadanos”, ya que “nadie como Rajoy ha subido los impuestos a la clase trabajadora, mientras ha recortado todas las políticas del Estado del Bienestar. 
  • Nadie como él ha aumentado la deuda pública, mientras caía el nivel de vida de la clase media; y nadie como él ha subido los índices de desigualdad” en nuestro país.
  • En este punto se ha referido a “los preocupantes datos del déficit público” y ha señalado que “los número nunca mienten”, y que “quien mintió de nuevo a los españoles fue Rajoy, que conocía el incumplimiento del déficit público y, en consecuencia, la grave situación de las cuentas públicas”. 
  • Para el líder socialista, este factor debe ser “un acicate más para lograr el gobierno del cambio de manera urgente, porque no podemos dejar el necesario equilibrio de las cuentas públicas en aquel que lo que ha hecho durante estos últimos cuatro años ha sido recortar, recortar y recortar las políticas públicas y del Estado del Bienestar”.
  • Pedro Sánchez ha asegurado que, en la negociación a tres que va a comenzar la próxima semana, “el PSOE va sin líneas rojas pero con firmes convicciones y una de ellas es que tenemos que poner fin al gobierno de Mariano Rajoy y materializar ese gobierno del cambio”. Para ello -continuó- “los socialistas estamos dispuestos a ceder y pediremos al resto de fuerzas que todos cedamos para que gane el cambio y gane España”.
  • Explicó que, “los últimos metros que nos quedan para cumplir ese difícil objetivo” los vamos a recorrer “con los mismo principios” que han caracterizado los 104 días transcurridos desde las elecciones; esto es, con los principios “de la fiabilidad, la coherencia, la capacidad de negociación e interlocución con distintos actores políticos y también con los valores que caracterizan al Partido Socialista”.
  • Durante su intervención, Sánchez ha insistido en que “España necesita abrir un nuevo tiempo político” y que “es evidente que el Partido Socialista es la única fuerza política que puede materializarlo porque tiene proyecto para toda España y capacidad de negociación para lograrlo, frente a un PP asediado por la corrupción, aislado, sin capacidad de interlocución con nadie y con un proyecto político agotado”. 
  • Por todo ello, el líder socialista ha apelado al “diálogo” y la “negociación” para lograr ese acuerdo que “espero y deseo” en las próximas semanas, asegurando que “por nosotros no va a ser”.
  • Respecto a cómo sería ese gobierno del cambio, Pedro Sánchez afirmó que tiene que ser “no partidista, esto es, que despolitice las instituciones” y las haga “representativas de la mayoría social”. 
  • También, deberá ser “un gobierno plural”, porque la sociedad española y el parlamento lo son. Y “parlamentario, porque es en el Congreso donde se van a decidir las cosas”, ya que, “al final, cualquier ley, cualquier decisión van a tener que contar con el respaldo de las tres fuerzas políticas del cambio”.
  • Y, finalmente, concluyó, deberá ser “un gobierno progresista”, para “alejar a España de la desigualdad, la corrupción y el enfrentamiento entre territorios al que le ha sumido Mariano Rajoy durante estos últimos cuatro años”. 
  • El cambio, aunque “difícil” y “complejo”, “es posible”, ha dicho Pedro Sánchez. “Nos quedan tres semanas y yo espero y deseo, que España no se vea abocada a repetir las elecciones y que dentro de muy poco tengamos un gobierno de cambio en nuestro país”.
  • Durante su intervención, Pedro Sánchez ha repasado y puesto en valor los principios que ha defendido en todo momento el PSOE en este tiempo. Así, se refirió a la fecha del Comité Federal del 28 de diciembre, donde “dijimos que siempre íbamos a construir proyectos políticos que articulasen una España unida en su diversidad, frente a la vieja derecha recentralizadora” y “también frente a nuevos y viejos partidos que han identificado el progresismo con un independentismo erróneo, que es lo que subyace detrás del mal llamado derecho a decidir”.
  • La segunda fecha que destacó fue el 2 de febrero, cuando el líder socialista aceptó la encomienda del jefe de Estado de presentarse a la investidura “para desbloquear la situación” creada por Rajoy, “intentar formar gobierno y, en el peor de los casos, poner en marcha el reloj de la democracia”. “Eso lo conseguimos y es algo que está en nuestro haber”, subrayó.
  • Otro hito de estos tres meses ha sido el 24 febrero, día en que se firmó el acuerdo “histórico” PSOE-Ciudadanos, en el que ambas formaciones “antepusimos los objetivos comunes” plasmados en 200 reformas, y que fue sometido a la aprobación de la militancia socialista y del Comité Federal; algo que –anunció- volverá a ocurrir si la negociación a tres produce “cambios sustanciales” en el acuerdo con Ciudadanos. 
  • Un acuerdo éste que, aunque es verdad que resultó “aritméticamente insuficiente”, era “el camino por el que teníamos que transitar si queríamos lograr el gobierno del cambio” y al que “esperamos que otras fuerzas se puedan unir antes de una eventual repetición de elecciones”.
  • También señaló la fecha del 1 de marzo, la de la sesión de investidura, asegurando que en con ella “cumplimos los objetivos” pues “demostramos que el PSOE es un instrumento real de cambio”, también que debía basarse en “el acuerdo”, en “el mestizaje ideológico”; y, finalmente, porque “cumplimos con la democracia y las instituciones”. Lástima –añadió- “que otras formaciones bloquearan el reloj del cambio”, que “espero podamos desbloquear en las próximas semanas”.
  • La última cita que destacó fue la reunión que mantuvo con el president Puigdemont el pasado 15 de marzo, para señalar que “simplemente el hecho de poder reunirnos abrió un espacio nuevo que yo espero que con diálogo, con capacidad de negociación y con acuerdo”, logre “resolver la crisis grave que nos afecta todos y que se vive en Cataluña”.
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INTERVENCIÓN COMPLETA

Gracias por acudir a este Comité Federal. El próximo dos de mayo, dentro de un mes, se va a cumplir la fecha para saber si España tiene o no un gobierno progresista, un gobierno de cambio, o se disuelven las Cortes y desgraciadamente, los españoles tenemos que acudir a una repetición de elecciones. 

Me gustaría empezar mi intervención con algunas reflexiones sobre cuál es el momento político actual. En esta hora decisiva en la que ya no hay margen para el error y en consecuencia, las decisiones que tomen los partidos políticos son decisivas, me gustaría decir que el Partido Socialista se reafirma en su determinación de intentar formar un gobierno de cambio que ponga fin a los cuatro años de gobierno del Partido Popular y que se eviten las elecciones. 

Y por eso, como la próxima semana vamos a comenzar el diálogo a tres, con las tres formaciones políticas que ejemplificamos ese ansia de cambio de millones de españoles expresado el 20D, pido la unidad de todas las fuerzas del cambio, que representamos quince millones de españoles, 199 escaños, tres formaciones políticas con un único objetivo: renovar España. 

Y esa idea es tan poderosa y mucho más poderosa que cualquier otro veto o línea roja que se pueda poner en esa negociación. España, lo hemos dicho muchas ocasiones, necesita con urgencia un gobierno, un cambio, un acuerdo que materialice ese gobierno del cambio que ansían muchos españoles. Es urgente porque tenemos un gobierno que gobierna de espaldas a los ciudadanos. 

Lo hemos visto en estos 104 días de legislatura sin gobierno: no acude al Congreso y evita la rendición de cuentas. Y también legisla sobre las espaldas de los ciudadanos. Hoy el señor Rajoy inaugura una conferencia sectorial sobre políticas sociales. 

Habrá que recordarle que nadie como él ha subido los impuestos a la clase media y trabajadora estos cuatro años mientras ha recortado las políticas relacionadas con el Estado del bienestar, que nadie como él ha aumentado la deuda pública en nuestro país mientras ha caído el nivel de vida de la clase media y trabajadora y nadie como él ha subido los índices de desigualdad en la historia de la democracia y somos el segundo país de la Unión Europea en términos de desigualdad social. 

O cuando hemos conocido los preocupantes datos del déficit público. Los números nunca mienten. Quien mintió de nuevo fue Mariano Rajoy, que conocía el incumplimiento del déficit público y la grave situación de las cuentas públicas en nuestro país. 

Y lejos de ser un factor de preocupación añadido, tiene que ser un acicate más para lograr el gobierno del cambio de manera urgente, porque no podemos dejar el necesario equilibrio de las cuentas públicas en aquel que lo que ha hecho estos cuatro años es recortar, recortar y recortar las políticas públicas y del Estado del bienestar. 

Por eso, amigos y amigas, en esa negociación a tres que vamos a comenzar la próxima semana, el PSOE va sin líneas rojas, pero con firmes convicciones. Una de ellas es que tenemos que poner fin al gobierno de Mariano Rajoy y materializar ese gobierno del cambio. Los socialistas estamos dispuestos a ceder y pediremos a las fuerzas del cambio que cedamos para que gane el cambio y gane España. 

Compañeros y compañeras, los últimos metros que nos quedan para lograr ese complejo objetivo que es el de materializar un gobierno de cambio, lo vamos a hacer con los mismos principios que hemos recorrido estos 104 días, con el principio de la fiabilidad, la coherencia, capacidad de negociación y de interlocución con distintos actores políticos y también con los valores que caracterizan al PSOE. 

Si hacemos un recorrido durante estos 104 días, las huellas de nuestro paso, podrían ejemplificarse en distintas fechas que hemos recorrido juntos. 28 de diciembre del año pasado. Tuvimos un Comité Federal en el que dijimos que el PSOE, con sus 90 escaños, se había convertido en la piedra angular de cualquier formación de gobierno y que nosotros no íbamos a renunciar a nuestro objetivo de propiciar el gobierno de cambio que necesitaban los españoles. 

En segundo lugar, dijimos que queríamos plantear un gobierno de cambio, con alternativa progresista, que alejara a España de la desigualdad, corrupción y el enfrentamiento entre territorios que ha pasado durante estos últimos cuatro años y en tercer lugar, dijimos que siempre íbamos a construir proyectos políticos que articulasen una España unida en su diversidad frente a aquellos proyectos políticos a la derecha, a la vieja derecha recentralizadora, que no reconoce como fortaleza la diversidad de los territorios sino como una debilidad, craso error, y también frente a nuevos y viejos partidos a la derecha y a la izquierda que han identificado con un independentismo erróneo que subyace debajo del mal llamado derecho a decidir. 

La segunda fecha es el 2 de febrero, el momento en el que el Partido Socialista aceptó la encomienda del Jefe del Estado. Aceptamos para desbloquear la situación en la que había sumido el Partido Popular y Mariano Rajoy a la democracia española. Y entonces lo dijimos en el anterior Comité Federal y lo reitero hoy, el PSOE tenía dos opciones: hacer lo mismo que Rajoy y situar a España en una situación de bloqueo o intentar liderar ese cambio y en el peor de los casos poner en marcha el reloj de la democracia. Eso lo conseguimos y es también algo que está en nuestro haber.

La tercera fecha, el 24 de febrero de este año. Fecha en la que el Partido Socialista firmó, a mi juicio, un acuerdo histórico en términos de democracia con el partido de Rivera, con el partido de Ciudadanos. 

¿Por qué digo en términos históricos?, porque es la primera vez que en la política nacional, en la política española, dos formaciones políticas acuerdan una hoja de ruta de legislatura, con 200 medidas de mejora de la calidad de vida de los españoles, con dos opciones ideológicas completamente distintas, como quedó claro en el pasado proceso electoral: un opción de centro izquierda y una opción de centro derecha, pero que antepusieron los objetivos comunes, el territorio común en el que podíamos entendernos para lograr esas 200 mejoras. 

Entonces dijimos, compañeros y compañeras, que cualquier acuerdo que fuera a ser abordado y logrado por la dirección federal y por el equipo negociador iba a ser sometido al refrendo de las bases y así ocurrió el pasado 27 de febrero con una participación de más del 50% y con un respaldo del 79%, el 80% de la militancia. Me reafirmo en ese compromiso, compañeros y compañeras, si en esa negociación a tres hay cambios sustanciales en el acuerdo con Ciudadanos, se volverá a someter a este Comité Federal y también una previa consulta dela militancia. 

Y dijimos, compañeros y compañeras, que es verdad que el acuerdo con Ciudadanos es un acuerdo aritméticamente insuficiente, porque sumamos 130 diputados, además de la diputada y el escaño de Coalición Canaria. Pero también dijimos que ese era el camino que teníamos que transitar los socialistas si queríamos lograr el gobierno del cambio. 

¿A qué me refiero? Habréis escuchado en muchas ocasiones de mi boca y también a miembros de la dirección federal hablar del mestizaje ideológico y es evidente. Los socialistas sabemos muy claramente que el pasado 20 de diciembre no salió un bloque mayoritario de izquierdas ni de derechas en el Congreso de los Diputados y que, en consecuencia, necesitamos ese mestizaje ideológico, es decir, el entendimiento transversal entre distintas formaciones políticas para lograr ese gobierno del cambio. 

Por tanto, es un paso importante el que dimos con Ciudadanos y esperamos que otras fuerzas del cambio se puedan unir a lo largo de estas últimas semanas antes de la fecha de una eventual repetición de elecciones. La cuarta fecha que me gustaría compartir con vosotros, compañeros y compañeras es, lógicamente, el 1 de marzo, la fecha de la investidura a la presidencia del Gobierno. 

Es verdad que se ha dicho en muchas ocasiones si cumplimos o no con los objetivos en ese debate, porque es verdad que desgraciadamente hoy no os estoy hablando como presidente del Gobierno. Pero, os diré lo siguiente: yo creo que sí cumplimos los objetivos. Cumplimos los objetivos, en primer lugar, con los españoles, porque demostramos que el Partido Socialista es un instrumento real de cambio y cuanto más fuerte esté el Partido Socialista más garantía de cambio habrá respecto a esta prórroga inexplicable que otras formaciones políticas que se llaman de izquierda han dado a Mariano Rajoy y al PP.

Cumplimos también un objetivo con el resto de formaciones políticas, compañeros y compañeras, porque dijimos claramente que la solución es el acuerdo, es el mestizaje ideológico y el acuerdo con Ciudadanos demuestra que es posible el cambio si tenemos en cuenta las diferencias de cada una de las organizaciones políticas. 

Y cumplimos también con las instituciones y con nuestra democracia porque pusimos en marcha el reloj de la democracia. La pena es que hubo otras formaciones políticas que mientras nosotros pusimos en marcha el reloj de la democracia, ellos bloquearon el reloj del cambio y, por eso, espero que las próximas tres semanas podamos desbloquear también el reloj del cambio. 

La última fecha que me gustaría compartir con vosotros, compañeros y compañeras, es la del pasado 15 de marzo, la reunión que tuvimos, yo en concreto, con el presidente de la Generalitat, con el señor Puigdemont. Es verdad que estamos hablando de uno de los problemas más complejos que tiene España, que afecta, no solamente, a la sociedad catalana, sino que nos afecta a todos en conjunto, al conjunto del país. 

Y, en consecuencia creo que simplemente el hecho de poder reunirnos con el president de la Generalitat abrió un espacio nuevo que yo espero que con diálogo, con capacidad de negociación y con acuerdo podamos lograr para resolver la crisis grave que nos afecta todos y que se vive en Cataluña. En conclusión. Os he relatado estas breves fechas para plantear lo siguiente. 

Y es que, es verdad que España necesita abrir un nuevo tiempo político en nuestro país y que es evidente que el Partido Socialista es la única fuerza política que puede materializarlo porque tiene proyecto para toda España y, en segundo lugar, capacidad de negociación para lograrlo. 

Frente a un PP, que lo estamos viendo en esta últimas semanas, asediado por la corrupción, aislado sin capacidad de interlocución con nadie y, desde luego, con un proyecto político agotado. Así que, los días que restan, compañeros y compañeras: diálogo, negociación y espero y deseo que un acuerdo.

Por nosotros no va a ser, no va a ser. Y, en ese sentido, a mí me gustaría recordar de nuevo a las fuerzas del cambio que somos más de 15 millones de españoles, que somos más de 190 escaños, 199 escaños, que somos tres formaciones políticas que tenemos un objetivo compartido que es el de renovar España, renovar España. Mirad, en muchas ocasiones se pregunta por parte de los medios de comunicación cómo sería ese gobierno del cambio. 

Y a mí me gustaría deciros algunas características de lo que yo creo necesita nuestro país para materializar ese gobierno del cambio. Ese gobierno del cambio tiene que ser un gobierno no partidista, que despolitice las instituciones y que sean representativas de la mayoría social en nuestro país. Tiene que ser un gobierno plural, porque la sociedad española es plural, el parlamento es plural y, en consecuencia, el gobierno tiene que ser plural. 

Debe ser un gobierno parlamentario, sí, porque es en el Congreso donde se van a decidir las cosas. Al final, cualquier ley, cualquier decisión va a tener que contar con el respaldo de las tres fuerzas políticas del cambio. ¿Difícil?, tal vez. ¿Democrático?, no se me ocurre algo más democrático que ese escenario. Y, finalmente, gobierno progresista, sí, progresista, para alejar a España de la desigualdad, la corrupción y el enfrentamiento entre territorios al que le ha sumido Mariano Rajoy durante estos últimos cuatro años. 

Compañeros y compañeras, el cambio, por difícil por complejo, es posible, nos quedan tres semanas y yo espero y deseo, compañeros y compañeras, que España no se vea abocada a repetir las elecciones y que dentro de muy poco tengamos un gobierno de cambio en nuestro país. Muchísimas gracias. 






El PSOE es un partido serio. Tenemos el mandato de las urnas de un cambio. El PSOE le ha puesto voz al deseo de cambio que hay en este país. (Isabel Rodríguez)



“Necesitamos un gobierno y lo necesitamos ya como necesitamos respirar o comer”. El portavoz del GPS en el Congreso, Antonio Hernando, ha asegurado este mediodía en Roquetas de Mar, Almería, que “la gente no puede esperar”. “Quizás Rajoy sí se puede permitir el lujo de esperar, pero hay millones de ciudadanos que no se pueden permitir el lujo ni de esperar ni que se repitan las elecciones”.
  • Por eso ha remarcado la importancia de esta semana en la que PSOE, Ciudadanos y Podemos “nos vamos a sentar juntos a trabajar”. “Todas las semanas superamos un imposible” y ahora hay que superar la creencia de que las tres fuerzas políticas son incompatibles. 
  • “El Partido Socialista, Ciudadanos y Podemos somos incompatibles con la prepotencia de Rajoy, con la corrupción del partido de Rajoy y con la desigualdad que ha creado Rajoy”, ha destacado ante los socialistas almerienses con los que ha mantenido un encuentro. Rajoy y el Partido Popular “nos obligan a ser compatibles y a llegar a un acuerdo para pactar un gobierno y una agenda reformista para los próximos años”. 
  • Los españoles están esperando que “un gobierno distinto, progresista, reformista les dé soluciones” y confía en “la buena voluntad” de los otros dos partidos para lograr un acuerdo. El Partido Socialista está dispuesto a explorar “el territorio llamado acuerdo” que hace muchos años no se utiliza en la política española. “No nos levantaremos de la mesa hasta que no haya acuerdo”.
  • Los españoles necesitan soluciones, pero es que además, para los socialistas, es prioritario “echar la inmoralidad del gobierno”. Y ha puesto como ejemplo al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. “Es inmoral que utilice a los enfermos de Hepatitis C para echar la culpa a las comunidades autónomas del incumplimiento del déficit”.
  • La política, la economía española no pueden seguir por más tiempo en manos del Partido Popular. Precisamente, Hernando ha recordado que antes de que termine abril, el Ejecutivo tiene que enviar su programa actualizado de déficit a Europa, lo que supondría “comprometer a los próximos gobiernos y no queremos que sea el gobierno de Rajoy el que lo haga sino el de Pedro Sánchez el que negocie para que no nos aprieten tanto”. 
  • “El Partido Popular quiere elecciones y las quiere desde el primer día, Rajoy quiere que le indulten de la corrupción de su partido, pero millones de españoles no pueden esperar”, ha concluido.
  • Hernando ha condenado también, durante su intervención, la violencia machista y su caso más reciente, el de una mujer rociada con gasolina y quemada viva, presuntamente por su pareja, en una barriada de Almería y que se encuentra muy grave con quemaduras en el 80% de su cuerpo. “Necesitamos un gobierno que impulse un pacto político contra la violencia de género”.

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